El cambio climático es un fenómeno con un gran impacto sociosanitario. La actividad de la radiación ultravioleta se correlaciona con un aumento de la morbilidad y mortalidad asociada a determinadas patologías cancerígenas. Sin duda la concienciación con el problema, junto con la adecuada vigilancia y la promoción de cuidados preventivos constituyen la respuesta más apropiada, pero ello no excluye la responsabilidad y la necesidad de ser consecuentes y respetuosos con el medio ambiente.
Tipo de afectaciones cutáneas:
Entre las lesiones más frecuentes y consideradas como agudas o a corto plazo por el daño tisular de las radiaciones ultravioletas destacamos el eritema y la quemadura solar, son responsables de ella los UVB, aparece a partir de las 2-4 horas de haber estado expuesto a las radiaciones solares, los signos que presentan son color rojo intenso o rosado (eritema) con sensación de dolor, prurito y tirantez de la piel, puede presentar escalofríos, nauseas, e incluso flictenas, su etiología es debida al daño de las radiaciones ultravioletas directamente en el ADN celular.
El envejecimiento cronológico lo tenemos asumido, pero lo no asumible, en muchos casos es el fotoenvejecimiento prematuro, debido a causas externas como son el cambio climático, con variaciones bruscas de temperatura, polución y el sol con las radiaciones ultravioletas y que como se dijo anteriormente, son absorbidas por la piel, una parte mínima de ellas son reflejadas pero las absorbidas no solamente dañan el ADN de las células sino que son destructoras de los componentes de sostén de la dermis como son el colágeno y la elastina, responsables de mantener una piel tersa, fina y elástica, provocando con ello un envejecimiento cutáneo donde nos encontraremos con la sequedad habitual en el anciano, por una depresión en las glándulas sebáceas, una falta de elasticidad con la retracción tardía al provocar un estiramiento de la piel, todo esto debido a su vez por los radicales libres que dañan las estructuras y que pueden ser contrarrestados mínimamente con aporte de oligoelementos como el cobre, zinc, manganeso o por vitaminas como la A,C,E.
El envejecimiento cutáneo se puede observar fácilmente en la cara, cuello, dorso de las manos con una piel oscura, aumento de arrugas y gruesa con el paso de los años, por ejemplo en un trabajador del campo expuesto a las radiaciones ultravioletas, podemos observar que el mismo paciente que presenta en zonas no expuestas como el tronco y las nalgas, una piel blanca y fina, las arrugas menos pronunciadas, piel atrófica, sequedad, flacidez y aumento de lesiones benignas como fibromas blandos y verruga seborreicas, puntos de rubí, sin embargo presenta en cuello, dorso manos y cara, unas arrugas pronunciadas, piel más oscura y gruesa. Las lesiones a largo plazo, tras el acumulo de radiaciones ultravioletas son las carcinogénesis derivadas de las radiaciones ultravioletas principalmente de los UVB, destacando como lesiones premaliganas la queratosis actínica con las características de que aparecen en pacientes con piel blanca, son de aspecto seco y descamativo o costroso de color amarillo-pardo o las queratosis solares que son máculas marrones, que geográficamente están presentes en zonas expuestas como cara, manos o escote.
Prevención para la salud
La fotoprotección puede ser química o farmacológica llamada “fotoprotectores o filtros solares”, utilizándolos como crema o lociones, deberemos de evitar pulverizaciones con el fin de evitar la liberación de gases contaminantes. Los fotoprotectores se clasifican por sus propiedades en:
a) Físicos.- Son minerales que dispersan o reflejan la luz, los ultravioletas y los infrarrojos, son opacos y evitan el paso de esta a la piel, nos podemos encontrar los elaborados a base de arcillas, caolines, oxido de cinc, etc. Son muy resistentes al agua.
b) Químicos.- Absorben la radiación UV que va sobre ellos y la transforman en energía no da- ñina a la piel. Entre estos tenemos salicilato de benzilo y bencil cinomato y mexoryl SX XL.
c) Mixtos.- Es el resultante de la mezcla de los dos anteriores son más potentes y se utilizan derivados generalmente del benzotriazol.
d) Biológicos.- Actúan como antioxidantes y evitan la formación de radicales libres (protectores del ADN), son utilizados la vitamina A, C y E.
Tomado de: Autor: Palomar Llatas F., Lección inaugural curso académico 2011/12. Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir”